Entre los planes favoritos de los madrileños para los domingos se cuelan las Brunch Sessions de Barceló Imagine, un completísimo brunch lleno de referencias musicales
¿Domingo y sin plan? Sobrevivir a la víspera del lunes sin planes atrayentes es complicado. Pero desde que el brunch, esa comida a medio camino entre el desayuno y el almuerzo, saltó el charco esta dinámica ha cambiado, convirtiéndose en una tendencia gastro que se resiste a pasar de moda. El plan que todo madrileño desea para convertir el domingo en el mejor día de la semana.
Pero, ¿cómo elegir el mejor brunch en una ciudad repleta propuestas? Pues bien, tenemos la respuesta. Si existe un espacio donde esta práctica va más allá de lo convencional y traspasa lo extraordinario ese es Barceló Imagine. Considerado uno de los máximos referentes hoteleros en ocio y entretenimiento, es el lugar de moda donde disfrutar del brunch los domingos a través de sus Brunch Sessions.
Brunch Sessions para un domingo extraordinario
Todos los domingos, la cálida Terraza Imagine albergará durante cuatro horas esta sesión de brunch que hará las delicias de los entusiastas de la gastronomía más hedonista. Un café fuerte y aromático o un té negro inglés, el preferido de John Lennon, marcan el inicio de un menú de olores mediterráneos e influencia internacional.
Como “artistas invitados”, sus propuestas van desde hojaldrados cruasanes de mantequilla y cereales, tablas de embutidos y queso o un esponjoso bizcocho casero. Además de su celebrado Açai Bowl un bol con fruta batida con plátano y helado de vainilla, plátano, frutos secos y un toque de coco rallado, capaz de hacernos viajar con la mente a las playas de las bossanovas de Joao Gilberto.
Casi una obligación es probar su rica tosta de pan nórdico con láminas de aguacate fresco y huevo poché, a menos que prefieras la opción vegana compuesta por una tosta de pan pochón, hummus, aguacate fresco laminado y brotes tiernos. Puedes también optar por el mítico huevo benedictino con salmón, salsa holandesa y espinacas salteadas, un must de las Brunch Sessions.
Entre plato y plato, el brunch es acompañado del aperitivo por excelencia para esas horas, el vermú. Aunque si se prefiere, podemos también decantarnos por una mimosa –considerado el cóctel perfecto para este desayuno tardío– o una espumosa copa de champán. Todo ello aderezado con una estupenda selección musical presente en todo momento durante el brunch.
Y si aún te queda hambre, o te puede la gula, podrás rematar el brunch con unas tortitas con nata y sirope de arce, o escoger entre la tarta de zanahoria con helado de yogurt o la tarta de queso preferida de Springsteen, con la que entonar el “Glory days” como lo haría el boss.
Merece la pena reservar la perezosa mañana de domingo para disfrutar de las Brunch Sessions en un espacio luminoso, moderno y que rezuma música por sus cuatro costados.