Dame alas, dame pomelo: El Patio de Mi Casa x el Plan Paloma.

 

Desde la Parada nos complace anunciar que somos la nueva embajada Le Tribute, y si te preguntas por qué es que aún no nos conoces, te lo explico.

 

Nuestras casas no pueden ir más de la mano y tener historias más afines. Ubicada en la antigua mansión de los marqueses de Santa Lucia, está la Parada, lo que comenzó como un humilde proyecto que desde sus inicios solo esperaba trasmitir el buen hacer de nuestras abuelas y madres tras los fogones, evolucionó de un modo tan espectacular que nos convertimos en un referente que no deja de crecer.

 

Decidimos crear esta simbiosis con la casa de Manuel Giró por las similitudes que nos hace ser quien somos, Le Tribute nació en 2016, un homenaje a los dos siglos de historia de la familia MG. La marca representa de un modo impecable la unión entre tradición e innovación. Sus famosas botellas recuerdan a esos jarabes y medicinas de la destilería.

Desde nuestro querido Patio de Mi Casa, el centro neurálgico de la Parada, donde se ubica nuestro exquisito bar, deseamos seguir por muchos años de la mano honrando el patrimonio y buen hacer de nuestras familias, seguir rompiendo reglas, saliéndonos de lo convencional mediante productos innovadores y con ese no se que… Que solo tú abuela podría conseguir.

 

Estamos orgullosos de donde venimos y queremos seguir estando muy orgullosos de hacia donde vamos. Brindamos por muchas grandes experiencias, por muchos momentos y por muchos años juntos ( y si es con un buen cóctel  en mano mejor)

 

Y como no podía ser de otro modo, nos unimos al Plan Paloma, ese cóctel que tantas alegrías e historias nos ha dado… y que seguirá dandonos.

Con nuestras versiones quisimos darle un poco de juego y chispa, aunque, siendo honestos, ya de por sí es perfecto.

 

Queriendo potenciar el lado cítrico creamos una versión en la que mezcal y ginebra Le Tribute ensamblan como si hubieran nacido juntos.

Rematamos con la soda de pomelo Le Tribute, la que nunca soñaste pero siempre quisiste, el claro ejemplo de que cuando quieres hacer algo bien, algo muy bien, puedes…..

Decoramos con sal de gusano con chile y un toque de pomelo fresco.

Lo más parecido a la Paloma original, pero con producto de primera y el cariño que solo un canario sabe poner.

Aquí el protagonista es el mezcal de agave cenizo silvestre del gran Alan Hernández, elaborado para la casa de Manuel Giró. 45 grados de carácter, ahumado celestial y filosofia sostenible (dos agaves nuevos por cada uno que cosechan).

 

Le aportamos más tierra y herencia con apenas un centilitro de Humo, licor de chipotle, un dash de sirope de agave, zumo de lima y pizca de sal. La soda de pomelo redondea y las flores frescas ponen la magia, recordando las catrinas y el Día de los Muertos.

Porque compartir y brindar sin alcohol no solo es posible, es necesario. Con pomelo fresco, un dash de sirope de naranja sanguina, zumo de lima y nuestra ya famosa soda de pomelo.

De garnish: crujientes de arroz y frutas tropicales. Y como en las demás recetas terminamos aromatizado con un perfume de lima kafir casero. (Las de mi balcón. Los cítricos más mimados del mundo)

 

Porque una Paloma no es solo un cóctel, es un viaje, un recuerdo y una sonrisa compartida. Te esperamos en El Patio de Mi Casa para alzar el vuelo juntos.