Recién inaugurado, Antoinette llega para revolucionar la oferta gastronómica de la zona de Callao / Preciados con un concepto de cocina de mercado inspirado en las auténticas brasseries parisinas.
Tanto la decoración como la carta están basadas en los tradicionales establecimientos francesesa los que se puede acudir en cualquier momento del día para degustar platos de toda la vida,así como crèpes, galettes, gofres y una gran variedad de licores y cócteles.
Madrid, enero de 2018.- Acaba de abrir puertas Antoinette, un establecimiento lleno de encanto que recrea a la perfección el concepto de las auténticas brasseries francesas. Ubicado en pleno corazón del centro de la capital (Calle Preciados, 34), esta novedosa propuesta, se basa en las mismas premisas con las que funcionan los restaurantes tradicionales tan característicos de Francia: ofrecer recetas de toda la vida con producto de calidad, a cualquier hora del día, en una atmósfera elegante y acogedora. De la mano de un grupo de socios franceses que han querido crear una pequeña embajada de los sabores y del art de vivre de su patria en Madrid, definitivamente, Antoinette está llamado a convertirse en un lugar de referencia para los amantes de la cultura francesa, de la buena gastronomía y de los espacios con personalidad propia.
Gracias al impacto de su cuidada decoración de estilo clásico, la sensación de encontrarse en Paris inunda al visitante nada más entrar. Sus toques barrocos y contemporáneos y detalles especiales como el aroma a brioche recién horneado o la música francesa que se escucha de fondo son algunos de los detalles que llaman la atención del comensal. Además, la distribución compartimentada de los espacios distribuidos en sus dos plantas está especialmente ideada para transmitir la sensación casa privada tal y como sucede en las brasseries tradicionales.
Antoinette se inspira de los momentos emblemáticos de la historia de Francia: la BelleÉpoque, los Années Folles y el siglo XVIII de la reina Marie-Antoinette.
Lo mejor de Francia en la mesa Con la cocina abierta en mitad de la sala principal, los comensales pueden ver en directo cómo el chef Jean-Jacques Payel y su equipo elaboran platos tan representativos de la rica tradición culinaria francesa como son la sopa de cebolla con Emmental gratinado y pan tostado o el mítico Boeuf Bourguignon (ragú de buey al estilo tradicional con patatas al vapor torneadas).
La amplia y muy trabajada carta de Antoinette tiene la particularidad de presentarse como si se tratase del programa de una representación teatral. Así, los entrantes se acogen al “Premier acte: les entrées en matière” destacando, dentro de los mismos, el Mi-cuit de foie gras de pato con nueces y chutney de membrillo acompañado de su brioche tostado además de algunas creaciones propias como el sabroso Huevo Antoinette: huevo escalfado con trufa negra acompañado de un salteado de champiñones salvajes y cebollino.
En el segundo acto o “Deuxième acte: les plats de résistance”, cabe reseñar el contundente Tartar de buey cortado a cuchillo con patatas fritas caseras, que también se puede pedir en su versión César, salteado vuelta y vuelta, o el sofisticado Magret de pato a la plancha con puré de remolacha y maracuyá con zanahorias y chirivías glaseadas con miel y romero.
En Antoinette merece mucho la pena dejar espacio para llegar al Tercer acto o “Troisième acte: les délicieux desserts”: el momento más dulce de la comida con una selección de seductores postres entre los que se cuentan el Arroz con leche de la abuela con ciruelas pasas de Agen al armañac, la legendaria tarta Tatin de Monsieur Paul Bocuse con crème fraîche y helado de vainilla o el delicado Brioche perdue Antoinette con nata montada a la rosa y helado de violeta. Salades gourmandes, galettes, crêpes y gofres Mención aparte merecen los interludios de la carta que homenajean a recetas icónicas de distintas regiones de Francia.
Uno de ellos está dedicado a “Les Salades gourmandes” (las ensaladas copiosas) que se sirven hasta las siete de la tarde. Entre ellos destacan la ensalada Niçoise originaria de la región de la Costa Azul, con lechuga, atún a la plancha, judías verdes, huevo mollet con ocho minutos de cocción, patatas, tomates cherry y tapenade de aceitunas negras. Otro interludio más recoge la centenaria tradición de las irresistibles galettes bretonas que en Antoinette se preparan como manda la tradición: con harina de trigo negro sarraceno molida exclusivamente con muela de sílex por Moulin de la Fatigue, un molino fundado en 1870 en Vitré (Bretaña).
Además de en su versión tradicional La Complète con huevo, queso Emmental y jamón cocido las hay en otras ocho variedades más, algunas tan sorprendentes como la llamada La Marie-Galante: con vieiras, cangrejos de río, chipirones, alga deshidratada y bisque de bogavante. Tampoco podían faltar las deliciosas crêpes, cuya masa se elabora con harina de trigo ecológica producida también en Francia. Igualmente, están presentes en sus modalidades más clásicas: con mantequilla y azúcar, con chantilly, con distintas mermeladas o con Nutella, entre otras, además de en creaciones exclusivas como es el caso de La Cubaine con plátano, chocolate con leche, helado de pistacho, nata montada y trocitos de nougatine o La Mont Saint-Michel con manzana salteada al licor de manzana y caramelo de mantequilla salada.
Por su parte, los gofres pueden ser diseñados por el comensal, eligiendo los ingredientes principales como la nata o el chocolate y entre los distintos tipos de mermeladas. Además, en la carta destacan varias creaciones propias del chef como La Forêt Noire, hecha a base de mermelada de cerezas guinda, mousse de chocolate y nata montada.
Por supuesto cualquier almuerzo o cena en Antoinette se acompaña de una amplia y excelente selección de vinos entre los que se contemplan referencias tanto francesas como españolas, además de los mejores champagnes, sidras de Francia de la Maisson Sassy y cervezas artesanales. Más de 20 vinos y 5 champagnes están disponible por copa. Además, a cualquier hora del día, se puede disfrutar del Café de flores, un café gourmet hecho a base de leche infusionada con lavanda y sirope de rosa y/o alguno de los más de 60 cócteles que incluye la carta de Antoinette y en la que conviven clásicos de siempre como el Dry Martini, el Old Fashioned o el Moscow Mule con una gran variedad de creaciones de autor, siempre con un toque afrancesado como son el #SoAntoinette con Gin Citadelle, licor de mora Chambord, sirope de rosa y champagne Solescence Brut Rosé o el Jardin de Mémé, elaborado a base de Liqueur St-Germain, licor de hierbas maceradas Chartreuse verde, absenta Van Gogh, lima, azúcar y clara de huevo.
Diversos espacios para sentirse como en París En Antoinette impera una atmósfera elegante y acogedora al más puro estilo francés gracias a su cuidada decoración conseguida a través de detalles únicos como los acabados de latón de las mesas, los cojines estampados de suave terciopelo y los cuadros y grabados alusivos a diversos iconos artísticos o históricos franceses. Así, el espacio se divide en dos plantas.
A la entrada, una amplia barra y algunas mesas altas en las que disfrutar de su extensa carta de cócteles, vinos, tés, cafés gourmet y otras bebidas de manera más informal. A continuación, los distintos espacios tienen su toque distintivo variando el tipo de iluminación y los sofisticados papeles que cubren las paredes.
También, se puede comer o cenar enfrente de la cocina abierta que parece una escena de un teatro, asistiendo al espectáculo de ver al equipo de cocina trabajar en directo o disfrutar de un ambiente más íntimo en su “Petit-Salon” habilitado para hasta 12 personas con posibilidad de utilizarse como reservado privado. En la parte inferior se encuentra una sala de 34 personas perfecta para eventos además del reservado privado para 6 personas. En total, Antoinette dispone de capacidad para acoger a 115 comensales (87 en mesa, 12 en barra y 16 en terraza) que serán deleitados siempre con una experiencia gastronómica muy especial. ANTOINETTE Calle Preciados, 34. Madrid
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Horarios de Domingo a Miércoles de 10.00 a 1.30 h. de Jueves a Sábado de 10.00 a 02.00 h. (Cocina ininterrumpida desde las 12.00 h.)
Precio medio: 40 € a la carta.
Menú del día de Lunes a Viernes de 13.00 a 16.00 h. 14,90 € en barra y mesas altas / 17,90 € en sala / 19,90 € en terraza.
